
Llegue a Brahma Kumaris a mis 21 años, siendo un adolescente saliendo al mundo y a la vida y viendo de que se trata. No buscaba algo en especial, me pareció interesante hacer el curso de meditación porque quería experimentar como el lado místico de la vida. A esa edad la vida es un poco de euforia con lo cual al llegar a la sede de Brahma Kumaris Argentina en aquel entonces en Recoleta, Santa Fe y Callao, me sentí muy atraído hacia la sala de meditación y sentía que me gustaba quedarme adentro simplemente descansando mi mente con la música suave. Solo estaba acostumbrado en aquel entonces al Rock. Salía siempre con mucha serenidad, y recuerdo caminar en silenció volviendo a mi casa. Por algún motivo que no entendía tenía mejores sentimientos, me sentía calmado, y me daban un trato muy bueno en la sede que me hacía sentir mucha paz. Decidí hacer todos los cursos, bien a mi estilo de todo o nada. Me sentía muy inspirado por todo el conocimiento, pero lo veía tan difícil de aplicar, ser vegetariano, meditar, no contestar mal a las personas, permanecer calmado, me sentía un niño mirando la cima de una montaña desde abajo. Luego me despreocupe y comencé a caminar por el camino de crecer en lo personal como persona, y siempre que tenía dificultades, consultaba a Moira, a Henry, Amalia, Luis, Mario y otros miembros de Brahma Kumaris quienes siempre estaba disponibles para responder mis preguntas. Solía ir a la sede con una lista de preguntas y como si fuera una entrevista les preguntaba a alguno de ellos si podía hablar que tenía preguntas. Cada respuesta la anotaba, desde como hacer para ser vegetariano, hasta como meditar si e mi casa la televisión estaba prendida y me distraía. Siempre anotaba las respuestas y al día siguiente volvía con mas. Así también preguntaba como dejar hábitos negativos en mi vida cotidiana con la meditación. Este era el lugar donde conseguía respuestas para la vida. Sabiduría. Con el tiempo empece a ordenar mis horarios de descanso, levantarme temprano para meditar e intentar siempre no enojarme y no hacer sentir mal a las personas. Tuve que hacer un gran esfuerzo por desapegarme de muchas relaciones de amigos, que si bien eran mis mejores amigos, llevaban una vida de malos hábitos que no me ayudaba a ser feliz. Con el tiempo empece a sentir el sabor de tener una mente tranquila, mantenerme sereno, relacionarme con buenos modales y respeto y así la vida espiritual se fue tornando natural en todas sus formas. Lo sentí mi refugió, el lugar donde encontraba, buena compañía, calma, buenos consejos, personas que me escuchan, que me podían orientar, y al ver que era bueno, fuí involucrándome cada vez mas. Me ofrecía a trabajar en distintas áreas del servicio de Brahma Kumaris, en lo técnico. Empece a verlos como una “familia” con las cuales trabajábamos juntos mucho tiempo, y siempre era compartir las tareas y conocimiento a cerca de como mejorar nuestra vida en algún aspecto. Cada vez comencé a sentir mas desgano por la vida de excesos, salidas nocturnas, ruido, y comencé a disfrutar mas del día, de acostarme temprano y de estar en la compañía de las personas de la sede. Yo pasaba tiempo con ellos, y al mismo tiempo que colaboraba hacia preguntas. Me volví “famoso por preguntar”.
Muchos de mis amigos al ver mis cambios, no lo tomaron bien, se disgustaron conmigo, con la organización, porque sentían que me habían llenado la cabeza ya que no quería mas salir con ellos a beber alcohol, fumar sustancias y a hacer vida nocturna. Les recomendaba que fueran a aprender a meditar pero lo único que recibía eran cargadas. Yo sentía que había descubierto algo que no podía hacérselo ver a los demás. Simplemente ahora ellos me rechazaban, pero la diferencia es que yo sabía que una vida saludable y sana era mejor que la vida que estaba haciendo. Por lo cual el cambio de estilo de vida nos fue separando mas y mas y con el tiempo dejamos de vernos. En aquel tiempo entendí el valor de tener autorespeto y elegir lo que es mejor para mi aunque nadie me apoye. Yo estaba seguro. Hoy nos seguimos viendo en forma eventual y el amor hacia ellos es el de siempre pero el cambios de estilo de vida hizo que yo creara un nuevo camino. Gracias a eso evite el próximo paso que ellos transitaron que fue el consumo de Cocaína y drogas pesadas. Ahí entendí que complacer a mis amigos no iba a hacerme feliz. Pero siempre los ame como mis mejores amigos manteniendo respeto por lo que elije cada uno.
Con el tiempo me torne profesor, empece a dar charlas y seminarios, viví en sedes, y viaje muchas veces a India y a otros sedes del mundo por servicio. Simplemente la mejor vida que podría haber tenido. Hoy ya tengo 37 años. Pase por muchos obstáculos y problemas, pero el conocimiento y la meditación siempre te ayudan a superarlos. No es que uno no se enoja mas, simplemente tiene el método para volver a estar en paz si eso pasa. Mi comportamiento se volvió suave, respetuoso, honesto en el trabajo, incorruptible y me esforcé siempre por incorporar virtudes en mi vida. Amor, paz, felicidad, perseverancia, entusiasmo, libertad, fe, respeto, benevolencia, honestidad, etc. Eso hago cada día, pienso que mas puedo mejorar.
Entiendo que los Brahma Kumaris no somos perfectos, pero si que estamos dedicados y nos esforzamos por ser mejores. Mirando hacia atrás estoy feliz de la vida que elegí y me digo a mi mismo menos mal que elegí el camino del conocimiento, de la meditación, del crecimiento personal, y no otro.
–
Leave a comment